Álvaro Serrano corta dos orejas en Alalpardo ante un buen novillo de Montealto

La localidad madrileña de Alalpardo vivió una emocionante tercera semifinal del Circuito de Novilladas de Madrid con seis jóvenes aspirantes frente a una bien presentada y seria novillada de Montealto. Si bien la disposición general fue notable, la tizona frustró más de un premio. Solo tres de los novilleros lograron tocar pelo en una tarde que tuvo en Álvaro Serrano a su gran protagonista.

Cristiano Torres abrió plaza con un ejemplar noble que no terminó de cuajar. Dos aparatosas volteretas sin consecuencias físicas marcaron su actuación, que apenas despegó en una tanda por el derecho. El fallo con la espada lo dejó en silencio.

Más pulido estuvo El Mene, que saludó al segundo con ajustadas verónicas y se acopló especialmente bien por el pitón derecho en dos tandas muy templadas y poderosas. Pero el novillo se vino abajo después de ellas y los aceros volvieron a ser su cruz, quedándose sin premio.

El momento cumbre llegó con el tercero, un “Verbenero” de Montealto que embistió con clase y fue a más. Álvaro Serrano supo verlo desde el primer lance, firmando una faena variada de capa y una obra templada en los medios por el derecho. Una estocada efectiva selló la obra y le valió las dos orejas, además de la vuelta al ruedo para el novillo de Montealto.

Joel Ramírez no tuvo la misma fortuna con su oponente, el más deslucido del envío de Agustín Montes. La faena nunca encontró ritmo ni eco en los tendidos, y el silencio fue su balance.

Muy diferente fue la disposición de Julio Méndez, que mostró firmeza y hondura tanto con el capote con la muleta, especialmente al natural, rubricando su actuación con una oreja que premió un conjunto muy serio del novillero nacido en tierras abulense.

Cerró la tarde Sergio Rollón, que tras un susto inicial con el capote fue ganando terreno con temple. Aunque el novillo tardó en entregarse, Rollón construyó una faena de menos a más que le permitió cortar un trofeo.